El comienzo del otoño se caracteriza por la inestabilidad climática con subidas y bajadas drásticas de la temperatura. Además, el calor del verano y las inundaciones de la gota fría han podido provocar daños a los vehículos. Un buen mantenimiento y un correcto funcionamiento del coche o moto son imprescindibles para poder hacer frente a la temporada de frío y lluvias que se avecina. Por ello, y para evitar costosas reparaciones, los expertos de Midas aconsejan realizar un mantenimiento de los elementos de los vehículos que hayan podido sufrir daños durante los últimos meses.

• Revisar los neumáticos, tarea obligada. Es esencial revisar el estado de los neumáticos, ya que son el único punto de contacto del coche y la moto con la calzada, especialmente importante para hacer frente a las épocas de frío y heladas. Durante la temporada estival, y debido a las altas temperaturas del asfalto, las ruedas han podido experimentar un desgaste mayor del esperado. Por ello, es fundamental comprobar que la presión de los neumáticos es la correcta, que la profundidad del dibujo no es menor de 1,6 mm y revisar el estado de la goma para asegurar que no tienen deformaciones, golpes o un desgaste irregular.

Además, como recuerdan desde Midas, realizar un ajuste de la alineación y demás elementos de suspensión es esencial para asegurar la seguridad al volante y mantener las prestaciones de los neumáticos. En el caso de las motos, el equilibrado de las ruedas evitará vibraciones, especialmente cuando se ruede a velocidades más altas.

• Comprobar el climatizador para evitar costosas facturas. Los expertos de Midas recuerdan también la importancia de revisar el circuito de climatización, después de su uso intensivo durante el verano, y asegurar, así, que todo el sistema está en perfectas condiciones para activar la calefacción con la llegada del frío. Además, es recomendable observar el filtro de habitáculo, responsable de filtrar el aire que respiramos en el coche y evitar que haya contaminación, agentes alérgenos…
• Reducir el consumo revisando los filtros. Revisar los filtros de aceite, combustión o partículas con motivo de un cambio de estación puede suponer un gran ahorro. Un filtro de aire en mal estado, por ejemplo, puede multiplicar por dos el consumo de un coche. Desde Midas recomiendan realizar esta verificación al menos cada 6 meses o cada 6.000 kilómetros.
• Frenar los gastos. Las pastillas y discos de frenos suelen desgastarse con el tiempo y uso, por lo que requieren un mantenimiento y sustitución periódica. Comprobar los distintos elementos evitará el daño de otras piezas y disminuirá el riesgo de accidentes, por lo que los expertos de Midas recomiendan revisar las pastillas y discos de freno cada seis meses o 20.000 kilómetros y el líquido de frenos cada dos años, sobre todo de forma especial antes de un viaje largo. Estas recomendaciones son especialmente importantes antes de la época de lluvias y frío, ya que puede aumentar el riesgo de accidente.
• Bombillas, sencilla comprobación para volver a la rutina con seguridad. Con la llegada del otoño, los días son cada vez más cortos y las horas de luz menores. Por ello, siempre es necesario revisar los faros del vehículo cuyo cristal ha podido degradarse durante el verano. Esto puede afectar a la seguridad en la conducción, ya que dificulta la difusión de la luz en la carretera provocando una menor visibilidad exterior desde el vehículo, a la vez que una visión reducida para el conductor.

En este sentido, y para ahorrar evitar costosas reparaciones, Midas aconseja a todos los conductores y motoristas que acudan a su centro más cercano para poder hacer una revisión completa de su coche o moto, principalmente a través de LA Revisión Oficial, que mantiene la garantía del fabricante. Un mantenimiento que, además, garantizará la seguridad en carretera.